29 diciembre 2011

Las mejores canciones del 2011


Es complicado elegir, de entre todas las canciones que salen en un año, aquellas que te han marcado más que otras. Sin duda, hay una serie de temas que por su calidad se deben incluir obligatoriamente dentro de la lista de mejores canciones del año. Otros, necesitan de un proceso de cribado para que la lista no se convierta en interminable. Así que, aquí os dejo las que han sido para mi las 20 mejores canciones del 2011. 

Enjoy!


The shrine / An argument - Fleet Foxes



Calgary - Bon Iver



Young Blood - The Naked and Famous



Santa Fe - Beirut



Aniversari - Manel



Stay young, go dancing - Death Cab For Cutie



Prueba / Error - Nudozurdo



Jump into the fog - The Wombats



Junk of the Heart - The Kooks



United - Pete and The Pirates



A mil años luz - Sidonie



Video Games - Lana del Rey



All in White - The Vaccines



Wonders - The Sound of Arrows



Lo que te hace grande - Vetusta Morla




L.I.F.E.G.O.E.S.O.N - Noah and The Whale 




León Comunión - Hola a Todo el Mundo





Major Minus - Coldplay



Breaking down - Florence and The Machine



AKA Broken Arrow - Noel Gallagher



21 diciembre 2011

Los mejores discos del 2011.


Bon Iver - Bon Iver

Las sensaciones que se generan al  escuchar este disco son casi, casi, indescriptibles. Justin Vernon, consigue, en su segundo trabajo, conmocionarnos y estremecernos, desde la calma de sus melodías. Pero, a pesar de esta maravillosa y enternecedora paz de sus temas, en gran parte, motivada por su voz, los sonidos son novedosos, experimentales y cuidados. Con ello consigue que rocemos un clímax musical en todas y cada una de sus canciones, que se hilan con cuidado. Las cuatro primeras canciones del disco nos reciben con calidez, anticipándonos como será la continuación del mismo, un conjunto de sonidos que me hacen pensar en un cowboy en medio de un paisaje de montaña nevado.  De entre todas ellas, merece la pena destacar Towers, Holocene y Calgary, tres buenos ejemplos de la grandeza de este disco.




Helplessness blues - Fleet Foxes

El disco que han creado estos chicos de Seattle es, simplemente, delicioso. Melodías cuidadas, guitarras, banjos, piano, teclados, hermosas letras, coros, percusión… Todas y cada una de las canciones de este disco están iluminadas con una luz especial, la que atraviesa los bosques de coníferas y se refleja en el agua de los lagos y ríos del estado de Washington. En conjunto forman un álbum perfecto, pero es obvio que alguna destaca sobre las demás, es el caso de Sim Sala Bim, Helplessness blues, Lorelai,  The shrine/ An argument, Blue Spotted Tail.




Junk Of The Heart - The Kooks

El tercer largo de los británicos sorprende en la primera escucha porque no hay ninguna canción especialmente animada o que te incite a bailar como en los anteriores, sin embargo  mantienen la frescura de las canciones, los estribillos de fácil inserción cerebral, pero sobretodo se aprecia una mejora en la producción y el cuidado de los detalles, las canciones suenan mejor que cualquiera de las incluidas en sus otros dos discos.
Hay que destacar, que segun los propios Kooks, descartaron todas las canciones que tenían seleccionadas para el album y en un mes compusieron todas nuevas.
Quizás el disco no ha recibido los halagos adecuados porque los trabajos que lo precedían habían dejado el listón muy alto, pero Junk of the Heart refleja la madurez y el saber estar de The Kooks.





This Modern Glitch - The Wombats

Estos chicos habían dejado el listón muy alto con su anterior trabajo. Pero tienen la vitalidad, la energía y el buen gusto para componer canciones que superen a las anteriores.
Todos sus temas son maravillosos y quizás, el hecho de haber incluido más teclados en sus canciones les aporta una mayor calidez, que unida a unos tiempos ligeramente más lentos, las vuelve más acogedoras.Las letras de sus canciones también han evolucionado, ahora son más maduras, menos quinceañeras.
This Modern Glich, pese a la evolución de sus creadores, es, como su predecesor, un disco bailable, poderoso, alegre, atrevido, vigoroso, intenso.




The Riptide - Beirut

El grupo liderado por Zach Condon ha logrado realizar un disco acogedor, quizá el más acogedor de todos los que tienen, con un acercamiento al pop cada vez más presente en las melodías de este grupo americano
The Riptide no da protagonismo a un instrumento en solitario, no destacan tanto las líneas de vientos, como en los trabajos anteriores. En este álbum, Beirut consigue que todos los instrumentos se unan y formen un pack que transforma su folk característico en algo mágico.
El disco comienza con dos temas geniales, A Candel’s Fire y Santa Fe, continua con una serie de temas más relajados y finalmente, se alcanza el  éxtasis con The Riptide, canción que comparte título con el disco. Un deslizante sonido de metrónomo aparece y desaparece sobre el piano generando una sensación mental difícil de olvidar.



Codes and Keys - Death Cab For Cutie

Aunque el último disco de Ben Gibbard y compañía no es mejor que los anteriores, sigue en la línea de estos. Sin embargo, hay varias cosas que se le pueden reprochar, como por ejemplo, que en su empeño de hacer canciones más complacientes y menos aburridas, han eliminado las partes instrumentales que les daban pie y las engrandecían. Además, ha perdido el hilo argumental que seguían las canciones de los discos que precedían este trabajo, lo que le ha dado un aire de recopilatorio. En detrimento de las líneas de bajo que enaltecían las antiguas canciones de Death Cab for Cutie, aparecen efectos vocales y sutiles teclados. Incluso, en determinadas escuchas, el disco suena repetitivo, pero, aún así, no nos podemos olvidar de que en conjunto forman un buen trabajo, aunque no el mejor. Destacan Codes and Keys, Monday Morning y Stay Young, Go dancing.



What do you expect from The Vaccines? - The Vaccines

Es maravilloso que un grupo que acaba de sacar su primer disco se cuele con el en todas las listas de mejores discos del año. The Vaccines son astutos. Con el título del disco ya nos hacían elucubrar que podría contener. No los conocíamos, no esperábamos nada de ellos y sin embargo, nos han dado mucho. Melodías frescas, ruidosas, bailables, llenas de guitarras y rock & roll, que en ocasiones nos transportan a esos años en que las chicas anudaban su coleta con un lazo y los chicos engominaban su pelo con brillantina. Todos los temas del disco se correlacionan, ninguno se sale de la pauta marcada, pero es cierto que hay alguno que destaca especialmente. De hecho, desde Nogaard hasta All in White, ambas incluidas, el disco alcanza su mayor esplendor.



One Thousand Pictures - Pete and The Pirates

Con este genial disco, el grupo inglés, quizá ha frenado sus  revoluciones pero ha ganado en intensidad. Aunque Pete and The Pirates es uno de esos grupos que la gente suele encasillar en el indie rock más bailable, con este disco se alejan aun mas de este calificativo ligeramente equivocado.
Gracias a las armonías mas trabajadas y las guitarras levemente más calmadas podemos apreciar mejor el trabajo del grupo en cada canción.




La Zona Sucia - Nacho Vegas

En La Zona Sucia, Nacho Vegas ha creado un espacio para  reflejar todo el dolor, odio, nostalgia, decepción, desesperanza, indefensión, que siente o, al menos, sentía. El disco refleja una multitud de sensaciones negativas y, sin embargo, hay veces que las melodías son tan dulces como una nana y la dureza de las letras arropada por ellas, se suaviza. Este es el caso de Taberneros, en la que, además, los coros, dulcifican la voz de Nacho o Perplejidad, donde las voces infantiles apoyan ciertas pinceladas de optimismo.
Sin duda alguna, lo mejor de los temas de La Zona Sucia son las letras, destacaría especialmente  Cuando te canses de mí, La gran broma final y Reloj sin manecillas como claros ejemplos de ello.



High Flying Birds - Noel Gallagher 

Ciertas personas nos vuelven locas, nos irritan, provocan, incluso, en determinados casos, hacen que sintamos aversión por ellas. Sin embargo, todo eso que nos hace detestarlas, es lo que las define y sin ello no serían  ellos mismo, si no otros. Esto es lo que le pasa a Noel Gallagher, que saca demasiado a menudo su lengua viperina perfectamente afilada, sin embargo, sin ella, no sería él. E igual le pasa componiendo. Sin crear canciones que nos hagan rememorar una y otra vez al extinguido grupo Oasis, dejaría de ser un Gallagher, que es lo que le está pasando a su hermano, sigue llevando el apellido, pero se ha dejado por el camino unos cuantos años de historia. A veces, aunque nos encante lo nuevo, nos tienen que dar algo que ya conocemos para que nos sintamos atraídos. Y eso es, en definitiva, lo que ha hecho el hermanísimo Noel, nos ha regalado un disco en el que las nuevas melodías nos recuerdan sus antiguas canciones, en las que la frescura de las nuevas composiciones, nos hacen añorar Oasis pero albergando aun la esperanza de que no está todo perdido o, más bien, extinguido.